lunes, 8 de octubre de 2012

LA PERSONA INDICADA


Un título tan breve como tan sugestivo marca mi regreso con una nueva entrada a mi blog. Traté de subir una mensual pero finalizando el año académico en mi trabajo (uno de ellos) se me fue enredando todo. En fin que acá estoy, 2:00 de la mañana y en el horario en que ustedes duermen a mi se me ha dado por escribir. Creo que esto confirma que los filósofos somos excéntricos, pues hasta hace unos 15 minutos estaba a punto de dormirme, pero esta idea me ha dado de pronto y no voy a permitir que la inspiración se me vaya y aclaro que no he prendido, enrolado, aspirado ni fumado nada.  Pensaba que antojarme de hacer limpieza en mi casa a esta misma hora cualquier día al azar era el tope de mis excentricidades, pero hoy he visto que no. Y aclaro que mi proceso de escritura en estas entradas es continuo. Tomo una idea, la desarrollo y no la suelto hasta que la concluyo, en otras palabras digo lo que siento y pienso tal cual se me vienen las ideas a la mente. Que raro que un filósofo escriba sin pensar mucho, pero que carajo éste es mi blog.

Así que se preguntarán ustedes (he perdido la modestia por completo, antes me escribía a mi mismo y hoy escribo para un público imaginario) qué me ha llevado a las dos de la mañana a escribir sobre este tema en particular. La respuesta espero sea revelada antes de concluir este escrito. En cada una de nuestras actividades siempre tratamos de hallar la persona correcta. Al practicar algún deporte buscamos ese compañero de equipo que se combine  y complemente bien con nosotros. Que mujer no fantasea con encontrar a su compañera ideal para ir de compras. Nuestros padres esperan que nosotros seamos la persona indicada. Sin embargo en este tipo de situaciones nos volvemos conformistas, pues acabamos no con la persona indicada sino con la persona disponible. Pero al hablar de sentimientos la cosa cambia.

La persona indicada, si tuviera que esbozar un concepto, es aquella que llega justo cuando la persona equivocada se ha ido de tu vida. Esto implica dos cosas: iremos por la vida encontrando personas indicadas en casi un círculo vicioso interminable y además que estaremos con muchas personas equivocadas. Desarrollaré por separado ambas cuestiones para poder responder por qué a esta dita hora estoy escribiendo sobre este tema.

Cuando empezamos en el mundo sentimental siempre iniciamos con la idea utópica de que esa primera persona que estará con uno, física y emocionalmente, será el amor de nuestras vidas. Pronto descubrimos que no, y por eso las separaciones de ese primer amor son tan complicadas. Nos aferramos a la idea de que tiene que funcionar, queremos que funcione, pero demasiado tarde nos damos cuenta de que estamos apenas practicando. Hay que ser realistas, esos amores entre dos personas que fueron su primera pareja van reduciéndose cada vez más, conforme las personas de 50 años en adelante van muriendo. Justo cuando entendemos que tenía que acabar porque estábamos apenas agarrando experiencia, es que notamos que era la persona equivocada. Ese es el gran problema del amor, suspende nuestra razón, se lleva por delante nuestro sentido común y nos deja a solas con nuestras emociones. Por eso el amor siempre me ha resultado un reto, pues al ser yo tan pero tan meticuloso y excesivamente racional me cuesta entrar en esa espiral en la que todo se ve bonito, en la realidad en la que no hay problemas, en el paraíso sentimental. Y desconocemos lo nutritivo que es para una relación el pelear, discutir. Dejar ese aspecto a un lado sólo hace que explotemos cuando ya no aguantamos más y esa pelea es casi siempre la única y la última de esa relación. Entonces es una persona más, obvio de las equivocadas, en nuestra vida. Lo realmente anecdótico de esto es que en su momento, esa persona que ahora detestamos y que no soportamos ni estar cerca de ella, en su momento fue la indicada.

Lo que nos deja con el elemento primario de toda esta situación, entender que la persona indicada no es una, en realidad son varias pues nuestros sentimientos son volátiles, como personas también lo somos y como individuos aún más. Pueda que un día esperemos algo de una persona, pero al día siguiente queremos otra cosa. Eso es normal. Más sin embargo nos aferramos a la idea de que la persona indicada es una sola y cuando la encontremos debemos aferrarnos a ella. Cerrarse en banda con esa idea hace que nos perdamos de lo divertido que resulta conocer nuevas personas indicadas, aprender de esas personas indicadas, saber que esas  personas indicadas sólo estarán por un tiempo en nuestras vidas (si algo excepcional no ocurre), asombrarse de como cada una de esas personas indicadas tiene un modelo mental acerca de como tú deberías ser (e increíblemente nunca concuerdas con su modelo mental). Esa ha sido uno de los puntos por los cuales siempre he sentido mucha fascinación por escribir del amor, incluso cuando estuve estudiando se me ocurrió una idea, que me pareció genial en su momento, acerca de una filosofía del amor pero rechacé prontamente esa idea justo cuando la primera persona indicada se fue de mi vida. 

No todo es malo con esas personas indicadas que desfilan por tu vida, pues aprendes cosas de ellas, te enriqueces profesionalmente con ellas cuando tienes una indicada con unas capacidades reflexivas y analíticas increíbles (estilo amor platónico, fundamentando mi argumento en esa idea platónica de que el amor es algo que se da entre intelectos y no entre cuerpos), como persona sueles crecer para bien y para mal con cada una de las personas indicadas. Pude concluir hace algún tiempo que la razón por la que a pesar de parecer la persona menos indicada para hablar de amor y personas indicadas, es porque ese mismo espíritu cientificista que me gasto no se hace a un lado cuando he tenido a esas personas indicadas conmigo, creo en el experimento, en el ensayo y el error, en la manipulación de variables y demás. Parezco frío, parezco insensible a veces, pero por ser como soy es que cambiar de una persona indicada a otra  no me es traumático. Lo veo como una oportunidad de empezar de nuevo, aunque también comparto aquella idea de Rodolfo LLinás de que la fidelidad es pereza mental, tener que acostumbrarse a una nueva indicada es siempre aburrido. En resumidas cuentas el espiral de indicadas es una oportunidad permanente para conocer personas, enamorarse y llenarse por igual de equivocadas.

Para cerrar esta entrada debo confesar que la razón por la que decidí escribir esto a estas horas es porque al estar sin la indicada, lleno de equivocadas, sin sueño y con demasiadas heineken encima, escribir una entrada es muy fácil. 



P.D. Lo subo días después porque en medio de las cervezas juraba que lo había hecho. Ah y me figuró volver a twitter

miércoles, 15 de agosto de 2012

UNA REIVINDICACIÓN AL JOKER DE HEATH LEDGER




Con su muerte meses antes del lanzamiento de Batman The Dark Knight, Heath Ledger sólo engrandeció lo increíble y fantástico de su performance como el Joker (odio cuando dicen el guasón) aunque nos haya costado la muerte de un gran actor. Su actuación fue sublime y magistral, tanto por la ejecución como por la personificación en sí del personaje. Confieso haber comprado el dvd y haberlo visto al menos 150 veces. Incluso tengo un poster de casi un metro con cincuenta centímetros justo encima de mi cama. Siempre me ha parecido genial la forma como este Joker juega con la mente de todos a su alrededor, como reta mentalmente a cada individuo cuando se lo propone, su definición del caos como lo más justo que hay, su pensamiento tan anárquico, su simpleza, pero sobre todo su planificación. ( http://www.youtube.com/watch?v=xxKJgOZXEho ).


Esta actuación le mereció un Oscar póstumo y el reconocimiento de toda la comunidad por tan excelente actuación. Pero trajo mitos también, como aquellos que dicen que murió porque el personaje del Joker se apoderó de él, que el personaje lo desgastó tanto que se refugió en poderosos calmntes, que Jack Nicholson (su predecesor en el papel) se lo había advertido. Esos mitos solo seguían engrandeciendo el notable trabajo de Ledger. Todo esto recargó de presión a quién osara ser el próximo villano en la secuela de Batman. Hasta ahí todo va normal. Pero como dice el Joker: introduce un poco de anarquía y el mundo se volverá un caos .... tenía que aparecer alguien a querer dañar el idilio que muchos tenemos con el Joker en sí.


En la misma semana de estreno de The Dark Knight Rises, continuación y cierre de la saga de Batman dirigida por Nolan, a un sujeto llamado James Holmes se le dio por irrumpir en una sala de cine en Colorado (justo donde se proyectaba Batman) y abrir fuego contra los allí presentes asesinando cobardemente a 12 personas e hiriendo a 50 más de ellas. Digo cobardemente porque el único pecado de estas personas fue su gusto por una excelente película, digo cobardemenete porque los atacó en total estado de indefensión, digo cobarde porque dentro de sus víctimas hubo niños, digo cobardemente porque todo fue premeditado. ( http://www.youtube.com/watch?v=d0JTCAs6GnE ).


Hasta ahí vi todo normal, y digo normal sin querer parecer un insensible. Sabemos que en la cultura norteamericana las matanzas sin sentido por parte de psicópatas, sociópatas y demás están a la orden del día. Lo que no me pareció normal fue que supuestamente la fuente de inspiración de este cobarde fue el Joker de Ledger. El cabello teñido de rojo y, según testigos del ataque cobarde, su actitud recordaba la del Joker. 


Esto me puso a pensar si realmente podría hablarse de inspiración por parte de Holmes en el Joker de Ledger y rápidamente rechacé tal idea, pues Nietzsche no tuvo culpa en que el loco de Hitler usará parte de su obra como el supuesto fundamento teórico de su movimiento absurdo pero legítimo. Así que pensé lo mismo de mi admirado Joker y este sujeto Holmes. No existe siquiera punto de comparación, pues el proceder del Joker era más sugestivo y menos de atacar frontalmente, mucho menos cobardemente. El Joker jugaba con la mente de las personas no con sus vidas, creía en la maldad humana más no hay evidencia en toda la película de que se ensuciaría con una masacre como la cometida por Holmes. En ese orden de ideas la actuación de Holmes está más próxima a un Bane, el nuevo villano de Batman, cuya fortaleza es su poderoso físico y su reto constante a la sociedad pero en términos puramente físicos.




No carga el Joker con un asesinato directamente por él cometido, a diferencia de Bane, no mata por placer el Joker a diferencia de Bane, Batman trata de entender al Joker, a Bane trata de prepararse para golpearlo,   el reto del Joker a Batman es puramente mental, mientras que el reto de Bane a Batman es puramente físico. ( http://www.youtube.com/watch?v=SPDnIukIvHk&feature=fvsr ).


Entonces insistiré en que Holmes nada tiene que ver con el Joker, relacionarlos es casi un pecado para con Ledger y que justificar la masacre cobardemente cometida en la performance del Joker es un insulto para quienes amamos el cine, pero sobre todo a quienes aún nos maravillamos con tan excelente actuación de Ledger.




P.S. Hay que ver Batman The Dark Knight Rises .... sin dudarlo. 

jueves, 19 de julio de 2012

TODO PARA ÚLTIMO MOMENTO


Por: Carlos Alberto Peña Orozco

Una nota aclaratoria antes de iniciar: este post no va dedicado a mis estudiantes que jamás inventan excusas para no entregarme los trabajos a tiempo, ni mucho menos son capaces de matar o enfermar un conocido para justificar la no entrega de un taller, que jamás han sufrido problemas con la internet ni su pc justo el día que deben entregar un ensayo, que en su vida serán capaces de inventar una cita médica para dejar de presentarse a una exposición asignada. No, esto no va dedicado a ellos. Por cierto, soy profesor de argumentación jurídica, enseño retórica entre otras cosas. Y el argumento de la ironía es de mis preferidos. Dicho esto, doy paso a la idea que me ocupará en esta publicación.


Suelen mentirnos con aquello de que guardamos lo mejor para el final, o de que lo bueno se hace esperar. MENTIRA, GRAN MENTIRA!!! El gran daño que nos hace ese tipo de ideas "populares" es ir creando en nosotros ese feo hábito de reservarnos (si, como no) la entrega de los compromisos para el final, cuando ya los plazos se nos van venciendo, convencidos de que en ese límite es cuando sacamos la casta o el ingenio se nos multiplica. Yo mismo estoy escribiendo esta entrada después de agotarme la batería de mi laptop y cuando vi que la batería está en 39% disponible apenas, así que me puse manos a la obra y creo que terminaré esto antes de que se descargue por completo.


Cuando niños la inmediatez es nuestro plazo máximo, queremos todo para ya. El mundo gira alrededor de esa medida de tiempo inmediata debido a que no tenemos deberes, solamente deseos, requerimientos y derechos. El problema empieza conforme vamos creciendo y adquirimos deberes, allí pasamos de la inmediatez al después. Esto debido a que ya no se trata de que tenemos que recibir todo de inmediato, sino que debemos entregar de inmediato pero entregamos deberes después.


Empezamos por simples tareas escolares cuya entrega vamos postergando por ver televisión, video juegos, amigos, jugar fútbol y demás. Algunos de ustedes dirán que no todos los niños son irresponsables, pero la verdad es que los nerditos o cerebritos son apenas una baja cifra de la población infantil. 


Luego trasladamos esas mismas tácticas dilatorias a las labores del hogar. Cuando uno ya está en edad de pensar en novia o novio (adolescencia aproximadamente), parece como que en ese mismo rango de edad se vuelve uno hábil para agarrar escoba y trapeador en casa, y aparecen en nuestro horizonte los quehaceres domésticos. Sólo cuando descubrimos que hacerlos con música muy alta y si es posible acompañados de algunas cervezas, resultan agradables las tareas del hogar. Antes de eso, pues las vemos .... no así: http://www.youtube.com/watch?v=yd-xdeuFfeo Cuando nene, esto te lo celebran, ya grande ponte a joder mientras haces aseo y verás, digo, sentirás los resultados.


Luego entramos en la edad adulta y esa actitud se afianza, pero ya la llevamos a otro plano. Es decir, cumplimos con los deberes cuando ya estamos en el límite del plazo asignado. Básicamente esto es así porque nos creemos los chachos del paseo o como dicen por ahí nos volvemos sobradorsitos o cancheritos .... así: http://www.youtube.com/watch?v=yP8MZl5GpsI


Entonces vamos por la vida creyendo que nos hacemos más astutos cuando se nos agotan los plazos de entrega de los compromisos que vamos adquiriendo, como que esa malicia indígena nos aflora a las 11 de la noche si debemos entregar algo a medianoche. Un claro ejemplo de esto fue el pago del impuesto vehicular. Desde febrero marzo se repartieron los recibos con plazo a junio, y evidentemente el último día todos quisieron pagar (entre esos yo, no voy a mentir), formando un caos en los bancos que ni se imaginan. Algo parecido a esto http://www.youtube.com/watch?v=4FxEMfbqyAc


Sería bueno algún día cumplir con una tarea y entregarla a tiempo, el problema es que entonces uno queda como el sapo, lambón o soplón y, pues mejor ser vago, flojo que sapo. Sería bueno despertarse para ir a clases, pero como tengo suficiente tiempo y soy rápido vistiéndome alcanzo a verme el resto del noticiero, aunque después vaya por la calle corriéndole la madre a todos porque parecen no entender que voy tarde. Sería bueno ir a guardar el carro antes de la hora en que empiece mi restricción, pero que va, alcanzo a tomarme dos cervezitas y corro a casa sin importarme que no debo beber y conducir (que descarado soy!). Sería bueno tener que viajar mañana a las 4am y dormirme temprano para despertarme sin problema, pero no, mejor me quedo viendo tv hasta medianoche porque igual la alarma del reloj nunca falla y me despierta. Sería bueno escribir este blog sin tener prisa porque la batería del pc se va a terminar, pero no. La dita batería se acabó y hasta acá llega este blog.

martes, 19 de junio de 2012

¿POR QUÉ VEO TANTAS VECES UP?

Por: Carlos Alberto Peña Orozco




Hay películas que marcan nuestras vidas (El club de la pelea por ejemplo), hay películas que merecen verse en cine (El planeta de los simios, la Evolución) hay películas que pasan irrelevantemente por nuestras vidas (La saga de crepúsculo), hay películas que ni vale la pena molestarse por ir a cine a verlas (Películas colombianas en general), algunas ni merecen una descargada pirata (cualquiera de la saga del transportador), y existen películas como Up que son caso a parte.

Ha sido la película, junto con Batman The Dark Knight, que más me he visto. Y pensaba porque pasaba esto. La interpretación de Ledger del guasón me pareció genial y con eso justificaba verla tantas veces y tener un poster gigante de él encima de mi cama, colgado en la pared. Pero qué pasaba con Up, seguía preguntándome. La historia de un señor cascarrabias que es fastidiado permanentemente por un niñito intenso no admite punto de comparación con Batman.


Supuse que tal vez empezar a ver Up justo después de terminar una relación de un año me había bajado las defensas masculinas. No me malintepreten, me refiero a esas defensas que tradicionalmente nos inculcan en nuestra sociedad machista latinoamericana. Esa misma que nos dice que los hombres no lloran, no expresan emociones en público, que somos los chachos del paseo y no podemos ser débiles. Así que suponía que ver Up era mi forma de canalizar mis sentimientos, esos que tiene uno cuando pierde a una persona valiosa. Después de seguirla viendo supe que no era por eso, aunque en 4 minutos largos los realizadores de la película narran magistralmente una historia de amor sin palabras y hasta nos pueden hacer llorar (si, lloré la primera vez, ¿y qué?). Visualmente esos cuatro minutos me impactaron y hasta los comparto con ustedes en este link, por si han cometido la burrada de aún no haber visto esta película ( http://www.youtube.com/watch?v=ZSd_IpzmcLM&feature=relmfu ). Si están leyendo no dejen de ver el link, así ya hayan visto la película.



Aunque me di cuenta de que no era por cuestiones sentimentales del todo, me desgasté tratando de explicarle a muchos de mis contactos que la razón por la que veía tanto la película no era porque me quería cortar las venas. Traté de ser lo más claro posible en mi explicación, pero creo que más de uno de mis conocidos están esperando que me tome un veneno para ratas o algo así. Creo que no se sorprenderían.


Después de seguir pensando en ello, recordé lo que decía cuando veía hace algunos años algunos cartoons como La vida moderna de rocko, Monster Inc, Jhonny Bravo, Los simpsons y demás. Los cartoons de hoy en día ya no son tan inocentes como antes. Son muy subidos de tono, o tienen mucho contenido entre líneas de todo tipo. Por ejemplo la salida del closet de linterna verde, el super héroe de Dc Comics. ( http://www.lapatilla.com/site/2012/06/01/linterna-verde-es-gay/ ). Y Up cumple este requisito. No es la típica película animada, se enmarca dentro de la línea de películas como Toy Story 3, Wall-e, películas animadas con mucha "filosofía" (si, lo dije) de fondo. 

En el caso de Up, el mensaje de fondo es claro: todo en la vida es un ciclo, algunos se apegan a sus ciclos y no reconocen lo increíble de reiniciar otros. Por eso es tan malo cerrarse a los cambios de ciclos. Así que si Up me ayudó a entender mi reciente separación, estaría más por lo clara que es la película al manifestarnos que existen miles de ciclos por cumplir en nuestras vidas. Si me quedo en esos 4 minutos geniales la idea del veneno o la cortada de las venas sería un magnifico recurso, pues uno podría pensar que si pierdes al amor de tu vida o tu media naranja no hay vida después de ello. Pero lo increíble de la película es cuando el Sr Fredricksen descubre en el libro de su esposa fallecida (y de paso quién fue el amor de su vida) unas páginas que nunca había visto. En una de esas páginas Ellie le escribió: gracias por la aventura, ahora ve por la tuya. Es un ciclo que se cierra, ahora hay que abrir otro. No les miento si les digo que esto me ayudó a entender un poco más la situación en la que me encontraba. Y acabé pensando después de esa escena que a la final todas las mujeres que han pasado por mi vida han sido ciclos, ciclos que se cierran y se abren y que me han dejado mucha información así como también buenos y malos recuerdos. 

Descartado el factor sentimental como el determinante de por qué seguía viendo tanto la película, y escuchando la canción por horas y horas, y colocando fotos de la peli en casi cualquier medio personal lo entendí. Es más, mientras escribo esta entrada sigo escuchando la canción una y otra vez ( http://www.youtube.com/watch?v=LaLegF2hAxI ). Entendí que el señor carl fredricksen era yo mismo, apegado a mis costumbres, con pánico de alterarlas y totalmente esquemático y repetitivo. Y entendí que el niñito Russell es la sociedad en general que te saca de las rutinas así no quieras, que te lleva a aventuras que por costumbrista te pierdes sin darle importancia, que te enseña que la vida es realmente una montaña rusa así te hayas esforzado en volverla un camino seguro. Y entendí que esa pesada casa que el sr fredricksen cargaba por toda la selva son esos recuerdos que no queremos dejar así nos lastimen. Y entendí que en la escena en que deja ir la casa es casi una catársis sentimental.




Pero sobre todo Up me ayudó a entender que esos cambios que tenemos que hacer cada vez que cerramos ciclos en nuestras vidas son los que realmente nos definen como personas, son los que nos enseñan lo extraordinariamente caótica y divertida que puede ser la vida y cuanto perdemos si le quitamos la diversión a nuestras vidas y acabamos siendo unos pesimistas, aburridos, amargados viejitos apáticos al mundo y a sus inacabables aventuras y nuevos ciclos.




P.S. Sigo sin facebook, sigo sin twitter y sigo feliz

miércoles, 23 de mayo de 2012

¿cómo sobreviví a desconectarme del mundo virtual social popular?


Empezó como una idea loca, justo como inician muchas de las grandes ideas que transforman una sociedad, el planeta entero e incluso hasta una simple vida de un individuo.

Conforme las redes sociales van inundando nuestra vida vamos pasando de una a otra siempre criticando la que vamos dejando atrás. Empezamos por Hi5, MySpace (aunque muchos aún digan que no la tuvieron), llegamos a la mega red Facebook, algunos conocimos pronto twitter y empezamos a criticar facebook, luego foursquare (la red social más estúpida que he conocido, pues haces lo mismo con google maps), formspring (más estúpida aún) y algunos pensamos que google plus salvaría nuestras vidas (sigo esperando que se destaque por encima de las otras).

En realidad facebook y twitter captaron nuestra total atención, en mi caso opté prontamente por twitter. No es por dármelas de la gran cosa en esto de la tecnología (aunque, ¿para qué ser modesto en el propio blogg de uno?) pero twitter fue mi elección prontamente. Facebook fue muy novedosa en la manera de inteconectarnos pero twitter fue más novedosa aún en interconectarnos en tiempo más real. Más rápido que inmediatamente noté que facebook iba a ser para problemas, y con el paso del tiempo y del conocimiento acumulado de esta red social, entendí que facebook era la tendencia voyerista en todo su furor. Todos tenían acceso a tu vida, pero aunque tú podías editar que mostrar, terminabas sucumbiendo a la tentación de hacerte una figura pública. Porque eso es lo que explota facebook, poder creerte un rockstar. Que todos vean que haces, que todos vean tus cosas, que todos monitoreen tus cambios de humor y ánimo. En fin, como acabo de mencionar, eres un rockstar en facebook.

Twitter me gustó más porque una vez entras en la dinámica del asunto, smartphone mediante, entiendes que el internet si es una verdadera autopista de información. Más que chismosear tu vida, la gente interactúa con tu vida. Obvio que también está el exagerado que indica hasta cuando va al baño, cuando se va a masturbar y demás, pero poder conectarte con el mundo día twitter es lo más cosmopolita que puede haber (Kant estaría feliz con su twitter @FilosofoAlemanNumeroUno).

Sin embargo acaba uno por vivir virtualmente su propia vida, y ni qué decir del blackberry messenger. Empezando porque la gente sigue insistiendo en que el blackberry es un smartphone cuando no cuenta con las características de lo que realmente un smartphone es. Son lentos, se traban, el App Store es limitadísimo,  básicamente es un teléfono que no se puede personalizar. Pero cuenta con el maligno messenger propio. Y es peor que cualquier red social. Lo que diga al respecto sería llover sobremojado, pero las cadenas, los chistes planos, que coloque estoy durmiendo y la gente te pregunte que haces, son apenas algunas de las joyas de este aparato del demonio (como le llamó una profesora a los blackberrys en un ensayo para justificar su contratación).

A pesar de sus deficiencias, terminé siendo un usuario regular (no entiendo porque insisto en ser modesto en mi propio blogg) de estas redes y herramientas sociales de comunicación. El problema es que prontamente entiendes que tu día es 24 horas abierto al público. Tus contactos empiezan a entender que tú no tienes vida propia, y que en vez de eso estás presto a cualquier solicitud en las horas más inapropiadas.

La situación se agrava al darte cuenta de que estas redes sociales no tienen una opción de offline como si tiene el bendito msn de hotmail, yahoo y gmail por ejemplo. Entonces en algún momento pierdes esa opción de control sobre tu propia vida. Y lo más grave es que pierdes esa opción de desconectarte el día que amaneces con malparidez existencial contra el mundo, ese día que te sientes más ermitaño que nunca. Esos días no vuelven más.

Entonces con todo esto en mente, un día te despiertas y dices que vas a cerrar twitter, facebook y cancelar el pin (obviamente twitteas al respecto y hasta colocas una actualización en BB Messenger) y la gente no cree. Todos te dicen que como vas a sobrevivir. Y pues sí, lo hice. Finalmente cerré twitter, facebook y pin en un mismo momento.

La sensación de tranquilidad fue increíble, pensé en twittiarlo pero fue imposible. Se me ocurrió una imagen graciosa para expresar como me sentía en bb msn y tampoco pude, tal vez un estado nuevo en facebook pero era menos probable. Ese día noté que la batería de mis teléfonos duró más que de costumbre, que no me enfadé al recibir chistes estúpidos ni cadenas innecesarias, que nadie me etiquetó en la foto de un gatico chistoso en facebook, pero que efectivamente estaba más tranquilo. Y de eso se trataba, de estar más tranquilo.

Lo que resultó determinante en la decisión que ya había tomado fue salir a cenar esa noche y ver en 4 mesas distintas, cuatro parejas cada una con bb en mano. Apenas si se vieron, si acaso sabrán que comieron. Y recordé lo chévere que es ver a los ojos a las personas mientras hablas con ellas, la intimidad que estableces con tus seres queridos al verles el rostro.

Así que tal vez no pueda decirle al mundo como me siento como minuto (aunque aún mantengo instagram porque me encanta al ser tan visual), si me siento feliz con la decisión que tomé. Aunque la gente me pregunte como si hubiese fallecido un ser querido como me siento, o por qué cometí la locura de cerrar mis redes, esta tranquilidad que siento ahora no tiene precio.


Por: CARLOS ALBERTO PEÑA OROZCO